Cancún.- Un nuevo caso de despido laboral injustificado en la administración pública se ha denunciado pero en esta ocasión resulta irónico debido a que se registra en la institución que debería velar por los intereses y derechos de las y los trabajadores del estado.
Georgina Paredes Lavalle, abogada, madre soltera y, hasta el pasado 4 de noviembre, conciliadora laboral del Centro de Conciliación Laboral de Quintana Roo (CCLQROO) adscrita a la delegación Benito Juárez, fue despedida arbitrariamente, sin razón ni motivo, y en un contexto de discriminación laboral por la actual directora del CCLQROO, Guillermina Corona, en complicidad con el delegado, Eduardo Ciceros Solís.
A tan solo un mes de su nombramiento como directora de la institución, Corona Trujillo, ha dado apertura a malas prácticas, presuntamente orquestadas por Ciceros Solís, contra los trabajadores del Centro que se han negado a participar en actos ilícitos para favorecer a empresas con expedientes activos.
De acuerdo a los hechos relatados por la ex conciliadora, Georgina Paredes, en un primer acercamiento Corona Trujillo le solicitó que firmará una renuncia, a lo que se negó. Sin embargo, fue el pasado viernes cuando a través de un mensaje Eduardo Ciceros le pidió que se presentará en las oficinas de la directora, dónde finalmente le informaron que a partir de ese momento su nombramiento había quedado sin efecto, es decir, fue despedida. En consecuencia, le bloquearon el acceso a toda la información del CCLQROO.
La ex conciliadora contrató a un notario para que diera fé del despido injustificado y la entrega de sus expedientes, ya que temía ser acusada de sustracción de documentos públicos o de pérdida de los mismos.
Paredes Lavalle fue nombrada cómo conciliadora laboral en el mes de noviembre de 2021, luego de haber obtenido resultados satisfactorios en el concurso de asignación de plazas del CCLQROO.
Este nombramiento tiene efecto por 3 años, de acuerdo al Artículo 684-U de la Ley Federal del Trabajo que menciona : “..EL NOMBRAMIENTO DE LOS CONCILIADORES TENDRÁ VIGENCIA DE 3 AÑOS”, en cumplimiento del Servicio Profesional de Carrera, desafortunadamente el marco legal ha sido violentado para dar prioridad a intereses personales y políticos del delegado y directora de la dependencia.
Hoy la abogada está siendo víctima de violencia laboral sin deberla ni temerla, pues asegura que ha desempeñado su función en total apegó a la ley, por lo que no ha dado motivos para ser despida de esta forma.
Considera que todo se trata de un acto de discriminación por exigir mejores condiciones laborales para todo el personal del Centro.
A pesar de esta grave violación a sus derechos, la agraviada afirma que su única petición es que sea reinstalada en en cargo “que se ha ganado con sudor” pero también que sea cambiada de adscripción por miedo a represalias que puedan tomar tanto Corona Trujillo y Ciceros Solís.
Su intención es recuperar su única fuente de ingresos, pues como madre soltera es difícil solventar los gastos de su hija menor de 8 años y las deudas que adquirió para pagar el rescate de su hijo de 23 años, quien fue secuestrado hace un par de meses.
Asegura que no desea llevar a cabo un proceso judicial porque es tardado y requiere de una fuerte cantidad de dinero, que sus condiciones no le permiten solventar, por lo que desea mediar y conciliar por la vía más accesible.
También expresó que confía en el gobierno de Mara Lezama para que su caso sea resuelto a la brevedad posible y regresar a su trabajo.
Así mismo, está tarde interpuso su denuncia por discriminación ante la Fiscalía Especializada en Delitos Contra la Mujer y por Razones de Género contra Eduardo Ciceros y Guillermina Corona, misma que fue sentada en el acta FGE/QROO/CAN/FEDCMYRG/11/3504/2022 y por la que se inició la carpeta de investigación FGE/QROO/CAN/FEDCMYRG/11/2006/2022.
