NizaPuerto

El narco creció porque en vez de poner a la policía estatal a combatir y a los agentes ministeriales a realizar su trabajo, estos gobernadores tomaron a 500 elementos policiacos y 97 agentes de la Fiscalía como guardaespaldas de funcionarios menores, periodistas y activistas del PRI, quienes los usaron como choferes, jardineros y mandanderos

Por Pedro Canché.- Los gobernadores Félix González Canto y Roberto Borge simplemente desmembraron a la policía estatal y ministerial y con ello fortalecieron a los grupos de narcos en Quintana Roo, además que existe la sospecha de la protección y pactos por vía de la Fiscalía del Estado-antes Procuraduría- con los tres grupos criminales que disputan la plaza.

En parte, el narco creció porque en vez de poner a la policía estatal a combatir y a los agentes ministeriales a realizar su trabajo, estos gobernadores tomaron a 500 elementos policiacos y 97 agentes de la Fiscalía como guardaespaldas de funcionarios menores, periodistas y activistas del PRI, quienes los usaron como choferes, jardineros y mandanderos, según documentos de la Secretaría de Seguridad Pública y Fiscalía al que tuvimos acceso. Solo dejaron a 700 elementos, de los cuales, un 60 % son personal administrativo. Prácticamente nadie en las calles.

Y las patrullas de la SSP fueron rematadas en complicidad con un periodista que les dejaba sendas ganancias, cuyo cómplice en el interior de la SSP las daba de baja al pasarlos como “chatarras”, sin licitación de por medio por supuesto.

El documento señala que 400 elementos de la policía estatal fueron retirados como escoltas. Solamente se dejaron a 100 agentes a disposición de ex funcionarios como lo marca el Comité integrado por la Secretaría de Gobierno, SSP y Fiscalía, sin embargo se redujo de 40 a 20 los escoltas de Roberto Borge y Félix González Canto, este último se le debe retirar luego de los 6 años que concluye en Febrero según  la ley aprobada en Septiembre por los diputados de la XV Legislatura, pues la XIV Legislatura encabezada por Pedro Flota habían aumentado hasta a 11 años los servicios de ayudantía.

De 37 escoltas al servicio de Félix González aún tiene 17. De los 41 de Borge se redujo a 21 y los 15 del director del Por Esto, Renán Castro Madera, se redujo a 7, quienes los usa de choferes y hasta como sirvientes para alimentar a sus caballos.

Oficios internos y aprobación de comités felixistas y borgistas aprobaron esa asignación. Este Febrero sesiona el Comité del gobernador Carlos Joaquín y con ello revisará el tema de ayudantía para funcionarios y particulares. ¿Aceptará los chantajes de Renán Castro madera, amigo del autonombrado payaso, Fidel Villanueva, para quedarse con sus policías sirvientes?.

Otros de los que perdieron escoltas fueron Pedro Flota Alcocer. Solo se quedó con un personal a su servicio.

Por otro lado, documentos de la Fiscalía señalan que la secretaria de Vinculación Social del PRI, Niza Puerto, le fue retirado el agente ministerial que usaba como chofer, la cual le fue otorgado desde hace 11 años por Félix González Canto. Gastón Alegre, el millonario radiodifusor le fueron retirados los 3 elementos ministeriales. El auditor a modo, Javier Cetina González, le fue retirado al agente ministerial, quien por cierto era su consuegro y se dedicaba a jugar dominós todas las tardes. Ahora su consuegro policiaco trabaja en la oficina de archivos desquitando su sueldo que le pagan los quintanarroenses.

Y hasta José Luis Toledo que tenía un agente ministerial de guarda espaldas le fue quitado. David Montiel, un funcionario menor del Registro Público de la Propiedad y Ludwing Vivas, ex subprocurador les quitaron este servicio.

Vivas trabaja con Remberto Estrada en Cancún en la dirección de Seguridad Pública de modo que será esa corporación quien le asigne un ayudante.  El documento interno de la Fiscalía señala que estos sujetos le fueron quitados ese privilegio porque no están contemplados en la ley.

Faltan 90 agentes de la Fiscalía asignados. En Febrero próximo el Comité sesionará para saber si continúan con los particulares o regresan a la corporación.

Por lo pronto, el gobierno de Carlos Joaquín tiene plaza para 500 nuevos agentes para la policía estatal. Un buen porcentaje de los policías asignados como escoltas ya se les secó en las venas el olfato policiaco.