RÉPLICA Responde Ackerman a Pardinas

Hoy @Reforma publica mi réplica a @JEPardinas, quien se hace el "decente" y "cortés" pero no deja de atacarme con bajezas desde todos sus espacios. Le invito a elevar la mira y debatir con argumentos. México, y nuestros lectores, lo merece. pic.twitter.com/MVOgbSoNgH

— John M. Ackerman (@JohnMAckerman) December 18, 2017

RÉPLICA
Responde Ackerman a Pardinas
En su columna del domingo, 17 de diciembre, el señor Juan Pardinas dice defender el “decoro” y la “cortesía” mientras en los hechos hace exactamente lo contrario. En Lugar de ofrecer argumentos y datos que pudieran rebatir las tesis que un servidor sostiene en los diferentes espacios donde labora, recurre a descalificación personal, ad hominen, para denostar e intentar desprestigiarme.
“Poco civilizado”, “mala leche”, “sarcástico”, “petulante, “embajador de lo peor de la política” navegante de “las aguas” negras de las redes sociales”, son algunos de los términos que decoran su invectiva.
Pardinas tuerce la realidad a su antojo. Inventa, por ejemplo, una “pelea” tuitera con Pedro Kumamoto que jamás existió. Lo que si hubo fueron cuestionamientos fundamentados a la retrógrada reforma electoral del diputado “independiente”, seguido ´por una invitación respetuosa a debatir públicamente y silencio absoluto de parte de Kumamoto.
Pardinas también elucubra sobre una supuesta agresión en contra de Malala Yousafzai. ¿Mi pecado? Haber invitado públicamente a la Nobel de la Paz a utilizar su investidura para exigirle cuentas a uno de los Presidentes más violentos, corruptos y autoritarios en la historia en México.
El columnista se parece a Peña Nieto al equiparar el cuestionamiento respetuoso con el “bullying”.
El Diccionario de la Real Academia Española define la “hipocresía” como el “fingimiento de las cualidades o sentimientos contrarios a lo que verdaderamente se tienen o experimentan” No hay mejor concepto para definir el proceder del señor Pardinas. Le invito a cumplir con sus propias palabras, elevar la mira y ofrecer argumentos en lugar de descalificaciones para defender sus puntos de vista.
John M. Ackerman