Por Pedro Canché
A un día de los asesinatos en las playas del Hyatt Ziva y Azul Beach, un centenar de extranjeros continúan con su fiesta Vacaya. Bailan y grita en el segundo piso mientras abajo con cintas amarillas están marcados los lugares donde cayeron los cuerpos de los 2 narcomenudistas a manos de 15 miembros de la banda rival. La arena blanca cubre la sangre roja, “gajes del oficio” en el mundo narco.
En el evento llamado Vacaya no usan mejoralitos para meterle alma a la fiesta, para eso el publico estadounidense tiene a sus proveedores que les surten una gama de narcóticos, mal de la sociedad moderna.
Y no es un hecho aislado. Cancún, Puerto Morelos, Riviera Maya, Playa del Carmen y Tulum el turismo extranjero es un gigante consumidor que paga en dólares y sostiene a las mafias con sus pistoleros, mobiliario e inmobiliario. Unas ganancias que superan a las propias ganancias del Estado libre de impuestos.
Y los proveedores matan por ello. Ese día en el Hyatt Ziva y Azul Beach, hoteles de gran lujo construidos sobre manglar en la hermosa Bahía Petenpich, de acuerdo a investigaciones del fiscal Óscar Montes de Oca a las 11:30 horas del jueves 4 de Noviembre 5 individuos llegaron con mochilas y dijeron que era su territorio y empezaron a venderle las sustancias de muerte al turismo ávido para sus “energías” en esa fiesta.
A las 14 horas con 30 minutos 15 hombres con armas de alto poder de uso exclusivo del ejército llegaron en lancha y se fueron directamente a disparar a los 2 narcomenudistas del grupo rival que estaban de turno cuidando la plaza y surtiendo a los turistas, entraron en las instalaciones, revisaron el área de la alberca con armas de alto poder, haciendo que huéspedes y trabajadores se escondieran en el lobby, cuarto y baños. Una turista histérica recibió un cachazo, sufriendo heridas leves.
El precio de consumir drogas en esa fiesta lo pagaron con el terror y la adrenalina. Los muertos lo estaban poniendo sus propios proveedores de drogas.
Pero la fiesta siguió y con nuevos proveedores. Total ningún tiroteo sería el aguafiestas.
En su página, Vacaya anunció que !EL RESORT 2021 DE VACAYA EN MÉXICO SE HA AGOTADO!
https://www.myvacaya.com/trip/mexico-resort-2021/
“Es Halloween y el Día de los Muertos y nos estamos apoderando de la joya más nueva de la Riviera Maya (una joya de 4 diamantes AAA para ser exactos): el nuevo Hyatt Ziva Riviera Cancún del 30 de octubre al 6 de noviembre de 2021. Este hermoso resort ofrece un ¡Nivel de lujo nunca antes visto a este precio y ella es toda nuestra durante 7 noches llenas de diversión!”.
¿Cuantos compraron la droga? El turismo extranjero es culpable número uno de la violencia que generan en estos destinos, es culpable de la devastación del manglar como por ejemplo donde están asentados el Hyatt Ziva y el Azul Beach y el problema social a estas tierras con un mar increíble y hermoso con una selva con mayas pobres.
El poder de la Zona Norte es a base de sangre y dólares de la muerte. Un dato a reflexionar, de los 70 asesinatos qué hay en Quintana Roo al mes, 68 corresponden a la lucha entre grupos delincuenciales que disputan el territorio.
Estos fueron las opiniones de algunos turistas paseando en las playas de la Bahía Petempich, ahí frente el Azul Beach y Hyatt Ziva.
“Escuchamos que los disparos ocurrieron en alguna parte de la playa en el lado del Hyatt y continuó hacia esta área” Dallen Court
“Esto pudo haber ocurrido en cualquier lugar… nunca había visto algo así, soy de Canadá, nací y crecí en Canadá, al menos mil km al norte de Toronto, así que por allá sólo hay nieve en el piso, es un lugar en el que prácticamente no pasa nada. He estado en los Estados Unidos desde 1994.
Yo estaba en la habitación, había estado fuera pero regresé a mi habitación pasaron unos dos minutos cuando sucedió todo.
Este es un viaje organizado y los organizadores nos mandaron un e-mail a todos. “No salgan, manténganse en sus habitaciones y esperen por más información”
“Todo lo que pude fue escuchar, acababa de regresar a mi habitación y escuché ruidos, creí que alguien había tirado algo en el piso, no sabía lo qe pasaba, así que pensé “¿Qué es esto?, No estoy muy seguro” No pude ver lo que pasaba porque no estaba abajo, habían muchas cosas que estaban pasando y yo no tenía ni idea, después fui notificado de que había un tirador y no podía salir de la habitación, entonces me quedé encerrado durante unas dos o tres horas. Sí, tuve un poco de miedo, pero si hubiera estado aquí en la playa o en la piscina lo hubiera estado más, porque hubiera visto la acción, la gente corriendo y todo eso, pero como ya estaba en mi habitación no fue tan aterrador”
