Cancún.- Rubén Báez, Integrante de la Alianza de Pastores de Cancún, aseguró que, pese a que la iglesia “llega hasta donde los programas sociales no lo hacen”, en los últimos años se han quedado cortas para recuperar el tejido social y, con ello, contribuir a combatir el problema de violencia que vive actualmente la ciudad.
En ese sentido, el pastor evangélico lamentó que la iglesia ha caído en una actitud pasiva ante los problemas sociales, lo que su denominación trata de revertir, al buscar “salir de las cuatro paredes”, para darle un mensaje de paz a la ciudadanía.
“La iglesia también en un momento ha estado pasiva, y por eso yo creo que hay que trabajar, tratar los puntos que nos aquejan, fomentar los valores y dialogar”, recalcó.
Acerca de esto último, Rubén Báez aseguró que, como parte de esta nueva actitud eclesiástica, se busca también fomentar los valores entre los integrantes de la comunidad evangélica; algo que solía hacerse anteriormente.
“Cada mes nos propusimos fomentar un valor. La espiritualidad es muy importante, pero sin valores a la espiritualidad le falta algo”, añadió.
Consideró el líder evangélico que la situación de violencia que vive la ciudad la está generando la falta de fomento de los valores, así como la influencia que tiene las redes sociales en los jóvenes, quienes, dijo, “quieren imitar cosas que no siempre son benéficas”.
En ese contexto, agregó que lo anterior empeoró sobre todo en la pandemia, periodo en el que muchas personas desertaron de la iglesia, pues se “preguntaban dónde estaba Dios”.
Rubén Báez indicó que, a partir de entonces, la Alianza de Pastores de Cancún fortaleció aún más sus vínculos con el gobierno municipal, para sumarse a las iniciativas sociales.
Añadió que la relación ha sido de respeto y estrecha comunicación, por lo que esperan que este vínculo se siga dando para mejorar el tejido social de manera conjunta.
