Chetumal.- El hallazgo del gusano barrenador en Centroamérica y en estados del sureste mexicano ha despertado gran preocupación entre los ganaderos de Quintana Roo.
Este parásito, también conocido como “colmoyote”, es producido por la mosca Cochlliomyia Hominivorax, que deposita sus huevos en las heridas de los animales.
Las larvas, al alimentarse de la sangre, causan infecciones que pueden ser letales para el ganado.
Según Sergio Crisanto Morteo, presidente de la Unión Ganadera Regional (UGR), este parásito, que había sido erradicado en México desde 1991, ha sido detectado recientemente en Centroamérica y Chiapas, lo que amenaza la proveeduría de carne hacia el norte del país y Estados Unidos.
El hato ganadero de Quintana Roo, con aproximadamente 107 mil ejemplares, se encuentra principalmente en Bacalar, y sus 933 productores formales han establecido cercos sanitarios en las fronteras con Campeche y Yucatán, solicitando además el apoyo de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpe) para contener la propagación.
Crisanto Morteo señaló que el hato ganadero de Quintana Roo se mantiene libre del gusano barrenador, pero la capacidad de vuelo de la mosca, que puede recorrer hasta 30 kilómetros por día, representa un riesgo constante.
Actualmente, el precio del kilogramo de ganado en pie es de 54 pesos, lo cual es aceptable para los productores, pero cualquier detección del parásito suspendería la compra-venta.
Esta situación preocupa a los exportadores de carne a Estados Unidos y subraya la importancia de las medidas preventivas implementadas por los ganaderos de la región.
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