Cancún.- La mujer originaria de Honduras que ayer por la noche fue ultimada a balazos en inmediaciones de la Supermanzana 66, se dedicaba a la venta de flores y además dejó en la orfandad a tres menores de edad.
De acuerdo con las primeras investigaciones, la pareja sentimental de la víctima también murió de la misma forma en la zona de El Crucero, hace unas semanas.
Vecinos del lugar refirieron a las autoridades que la ahora occisa había dejado encargados a sus hijos en una tienda mientras comercializaba sus productos previo al ataque que le arrebató la vida. Los infantes tienen nueve, 12 y 17 años de edad, respectivamente.
La Fiscalía General del Estado (FGE) ya investiga cuáles pudieron haber sido las causas que habrían originado el atentado contra esta mujer además de intentar localizar a sus familiares fuera de México.