Por Pedro Canché
En una reunión Mara Lezama le dijo a su equipo que había sido amenazado por un ex diputado federal quien fue cobijado por Morena.
Se le olvidó que ahí estaba su esposo, Omar, quien sorprendido por la franca revelación se enojó con el ex diputado a quien dijo lo buscaría y reclamaría esa amenaza contra la integridad física de su consorte.
Debería ir Omar Terrazas y denunciar ante la Fiscalía.
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Por cierto en Octubre serán las comparecencias y el fiscal Óscar Montes de Oca contestará la metralla de los diputados. El fiscal que Mara Lezama quiere, Jorge Aguilar “El Topo”, prefiere ir por la presidencia municipal de Cancún para no salir como cadáver político de una Fiscalía no apta para políticos.
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Hace un par de años unos abogados me mostraron unas facturas que les debían por el Gobierno del Estado en la administración de Roberto Borge. Eran 265 millones de pesos por supuesta publicidad de destinos turísticos a empresas de Uruguay, España y Brasil.
Le pregunté al tesorero joaquinista, Asunción Ramírez y me explicó que decenas de empresas fantasmas de México y otros países reclamaban los pagos al Estado. Entonces los turnaban a un juez y si ellos demostraban que sí se les debía entonces procedían a pagar. Muchas de estas empresas no tenían los soportes, claro está no demandaron.
Los pasivos con proveedores con Roberto Borge además de la deuda pública ascendía a 7 mil millones de pesos. Deudas a empresas fantasmas que el gobierno se negó a pagar para no deprimir las arcas.
Esos pasivos arrastrados de sexenios anteriores y los pasivos del gobierno de Carlos Joaquín por los 5 mil millones de pesos que dejaron de recaudarse por la pandemia, arrojaron que salen en tablas con los 5 mil millones de pasivos del que la gobernadora Mara habló ayer.
Falta que la gobernadora nos desglose cuantos pasivos son de Félix, Borge y Carlos Joaquín para poner en su justa medianía la crítica propia y lo que hará.
Por cierto en la Agencia Estratégica de Proyectos (Agepro) continúa Alberto Alonso al frente y bien haría en presentar un inventario de las propiedades de Quintana Roo y pues a venderlo y pagar a los bancos los 21 mil millones heredados por Félix y Borge (ellos explícitamente), chavos pirruris que llegaron por la calentura de los votantes hoy con el uniforme de Morena.
Mara Lezama deberá determinar con su novato secretario de Sefiplan, Eugenio Segura, cuantos de estos 5 mil millones de pesos provienen de empresas fantasmas y cancelarles el pago.
