Chetumal, Quintana Roo. – El magistrado Mario Alberto Aguilar Laguardia, integrante del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Quintana Roo, anunció su renuncia anticipada a su cargo, el cual concluiría originalmente el 2 de diciembre de 2025.
A través de un comunicado dirigido al personal judicial, Aguilar Laguardia explicó que su decisión responde a motivos políticos y a lo estipulado en la Constitución del Estado de Quintana Roo, la cual establece la posibilidad de una renuncia anticipada.
“Esta experiencia fortalece mis lazos profesionales con ustedes y consolida el ánimo que la acción jurídica emplea al resolver sentencias”, expresó en su mensaje de despedida.
El magistrado también resaltó la importancia de la ética y la jurisprudencia en el ejercicio de la justicia, exhortando a sus colegas a desempeñarse con apego a los principios del bien común y la visión de una “ciudad ideal”, inspirada en el pensamiento filosófico de Platón.
Su salida anticipada marca el inicio de una nueva etapa en el Tribunal Superior de Justicia de Quintana Roo, que en los próximos meses deberá definir el proceso para su relevo.
Aquí su mensaje de despedida:
Sirva este conducto para manifestarles mi agradecimiento, por estos años
como impartidor de justicia (2011-2025), esta experiencia fortalece mis lazos
profesionales contigo y consolida el ánimo que la acción jurídica emplea al
resolver sentencias.
Por motivos políticos y por así contemplario la Constitución Polftica del Estado Libre y Soberano de Quintana Roo, he decidido optar por el supuesto de
renuncia anticipada a mi función jurisdiccional, la cual concluye el 2 de
diciembre del 2025 y que los términos de la actual constitución seria al 31 de
agosto del mismo año,.
Esta confianza y respeto como juzgador no son posibles sin el enorme
entusiasmo que me han demostrado acompañándome en las diferentes
áreas de la segunda instancia.
Les exhorto a aprovechar este nuevo capítulo del Tribunal Superior de Justicia
del Estado de Quintana Roo y a desempeñarse dentro de los principios éticos
de la ley y la jurisprudencia, con la fe en la virtud del bien común, de la
“ciudad ideal” planteada en el apostolado filosófico de Platón y su afamada
“Republica”.
Con la admiración y respeto de siempre.