Busqueda

Cancún.- A tan sólo 19 días de cumplirse un año de la última vez que fue vista la niña Fernanda Cayetana, su madre Deysi Blanco continúa con la lucha incansable para encontrar con o sin vida a su pequeña con ayuda de la Fiscalía General del Estado (FGE), dos perros rastreadores, el colectivo Madres Buscadoras y las fuerzas armadas.

La mañana de ayer realizaron un nuevo operativo de búsqueda, en esta ocasión, en la zona de matorrales de Rancho Viejo, zona continental de Isla Mujeres, donde las cámaras del C5 captaron al principal sospechoso de la desaparición de la menor, el taquero y taxista Marco “N”, entrando entre la maleza y llevando en sus manos una nevera blanca, la cual hasta el momento tampoco ha sido encontrada.

En punto de las 8 de la mañana todos los participantes del operativo se dieron cita en el estacionamiento de la Fiscalía de Cancún equipados con picos, palas y demás indumentaria útil para buscar y encontrar cualquier indicio para localizar a la menor.

Minutos después se inicia el recorrido hacia la zona de búsqueda, durante el trayecto el equipo se mantiene concentrado hasta llegar a un camino de terracería en mal estado, mismo por donde pasó el taxista y dañó su vehículo cuando transportaba una nevera blanca y un tambo desaparecidos, según lo narra la señora Deysi Blanco.

“Esa bendita hielera no la hemos encontrado y tampoco la Fiscalía. En las cámaras del C5 se ve claramente cómo Marcos ingresa en este camino de maleza y terracería y se le ve con una hielera grande, de color blanco, y un tambo, pero ni uno ni otro hemos encontrado”, expresa.

Agrega que “en los videos se ve que entra en esta zona, pero no se ve en donde sale, creemos que salió por la Ciudad Militar, en donde no hay cámaras del C5”.

Pero no son los únicos datos que conoce la madre, también han logrado conocer que después de salir de esa zona el Taquero llevó el vehículo al mecánico, quien declaró que al interior del coche olía a podrido.

“La hilera no la hemos encontrado, el taxi sigue en la FGE, debajo de la unidad está dañada y la zona en donde paso es roca, piedra filosa, y creemos que por su desesperación y adrenalina no le importó dañar su carro, lo que quería era huir, escapar de allí”, dice la mujer.

Durante un área de aproximadamente 100 metros, el convoy de búsqueda movió ramas, piedras, basura y escarbo la tierra pero no encontraron nada. Los ejemplares caninos olfateaban todos los rincones pero en ninguno se encontró rastro alguno.

Después de seis horas de búsqueda, el operativo se detiene pero las esperanzas siguen vivas. El equipo regresa a la Fiscalía. Allá un agente proveniente de la Ciudad de México le asegura a la agobiada madre que interrogará tanto al taquero como a su esposa hasta que revelen dónde está Fernanda Cayetana.

Mientras tanto Deysi Blanco tendrá que esperar hasta que la promesa de Raciel Lopez, el fiscal interino, cumpla con la promesa de traer un equipo especializado de buzos para realizar operativos en cenotes ubicados en la misma zona de Rancho Viejo.

Allá es el único punto que falta por inspeccionar, la madre no se deja vencer y sigue en la lucha, nada está escrito y solo quiere encontrar a su pequeña Fernanda Cayetana.

Con información de La Verdad Noticias