El día de ayer se llevó a cabo la presentación del libro “Conflicto de Límites Territoriales en la Península de Yucatán” en una de las localidades afectadas por dicha disputa, como lo es la de Guillermo Prieto.
El evento estuvo a cargo de su autor, el Dr. Ignacio Alonso Velasco, del licenciado Andrés Blanco Cruz y del profesor Alejandro Castillo, quienes tuvieron la oportunidad de intercambiar sus puntos de vista con pobladores de las comunidades de Caña Brava, Blasillo, Hermenegildo Galeana, Felipe Ángeles y de Guillermo Prieto.
Todas estas localidades tienen en común el hecho de que son reclamadas como propias tanto por el Municipio de Othón P. Blanco, perteneciente a Quintana Roo, como por el Municipio de Calakmul, del vecino Estado de Campeche. Aparte existe unas cuarenta localidades, con un total de 23 mil 484 habitantes, que comparten los Estados de Yucatán y Quintana Roo en una superficie de 5 mil 400 km2.
En concreto, las localidades bajo indeterminación jurisdiccional entre Campeche y Quintana Roo son un total de 33, que se encuentran en una superficie territorial total de 4 mil 800 km2, divididas por el Estado de Quintana Roo, en dos alcaldías diferentes, Dos Aguadas, en la parte septentrional, y Cerro de las Flores, en la zona meridional.
El libro presentado es fruto de consultas bibliográficas, trabajo de archivo, entrevistas y, por supuesto, de trabajo de campo. Fueron varias las jornadas en las que el autor del trabajo de investigación se dedicó a encuestar a los pobladores con la intención de hacer un diagnóstico de las condiciones de vida de la población de referencia y de analizar cómo les impacta el hecho de residir en un territorio bajo indefinición jurisdiccional.
De la presentación del libro se pudo extraer la idea de que la vía idónea para lograr el desarrollo sostenible de esas comunidades es mediante su colaboración para la exigencia colectiva de sus derechos, tal y como están haciendo para conseguir que el próximo año puedan contar con el servicio de agua potable, suministrado por el Estado de Quintana Roo, por medio de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA).
