Chetumal, Quintana Roo.-En esta nueva era tecnológica en la que el contacto online ha desaparecido las fronteras espaciales entre las personas, el acoso cibernético y grooming también ha incrementado su presencia en la medida que tenemos contacto con los medios digitales de comunicación, lo cual también aumenta nuestra exposición a violencias online.
Por ello, es importante saber qué es el acoso cibernético y el Grooming.
Acoso cibernetico: es un acto agresivo e intencionado llevado a acabo de una manera repetida y constante a lo largo del tiempo, mediante el uso de formas de contacto electrónicas por parte de un grupo o de un individuo contra una víctima que no puede defenderse fácilmente.
Grooming: es una serie de conductas y acciones deliberadamente emprendidas por un adulto con el objetivo de ganarse la amistad de un menor de edad, creando una conexión emocional con el mismo, con el fin de disminuir las inhibiciones del infante y poder abusar de el.
El consejo estatal de población (COESPO) registra 283 mil 253 personas con edades entre 12 a 18 años, mujeres y hombre en Quintana Roo, por lo que de acuerdo con el estudio del (INEGI), los menores que han sufrido acoso cibernético o Grooming son aproximadamente 83 mil 303.
Tal es el caso de esta menor llamada (Monserrat).
Su tormento empieza con mensajes que le envían a través del messenger de facebook, donde le comentaba una mujer que se hace llamar (Angelica J) aparentemente originaria de Chetumal y trabajando en Panda Express, con estudio en enfermería general en el CONALEP “Plantel Jesús Martinez Ross”.
Angelica J.- “oye tengo tus fotos”
Monserrat.-“Tú las subiste”
De esta manera es como empieza una de tantas formas de acoso que pudieran vivir.
Alguno de los menores de edad que se encuentran en nuestro entorno,al aceptar a personas desconocidas de las cuales desconocen la intención de esa solicitud de amistad.
Todo trasciende a manera de presión de que divulgaran fotos de la persona que es acosada en ese momento, si ella no accede al trato que le proponen.
Presionándola con mensajes en los cuales le afirman haber publicado fotos de ella en condiciones inadecuadas y que si no quieren que se publiquen más tendrán que acceder a sus peticiones. La victima menciona que es falso y el acosador le dice que las publico con otro perfil falso que creo.
Esta persona al ver que estaba siendo ignorado y no cumplía con su objetivo, escribió una ultima amenaza la cual consistía en que publicaría todas sus fotos.
El acosador al no tener la respuesta deseada en instantes creo otra cuenta falsa con el nombre de (Yaslei M. C.) aparentemente originaria de Chetumal con la que empezó de la siguiente forma.
Con el objetivo de hacerse su amiga y mostrando una actitud de preocupación hacia la victima.
Es así empieza el seguimiento de la forma en la que operan algunas veces estas personas.
Esta persona asegurando que uno de los acosadores lo había publicado en un grupo, la segunda persona que se hacia pasar por alguien preocupada a la situación le solicitaba su usuario y su contraseña de facebook, la victima le pedía a esta persona que la ayudara.
La labor de esta persona era irle metiendo miedo a la victima para que esta acceda de alguna forma a lo que le solicitaban por la tal Angelica J.
Si analizamos la conversación vemos que esta persona tenia el objetivo de obtener su usuario y contraseña de facebook.
Esta es una de tantas formas en las que operan los acosadores cibernéticos.
Las formas más usuales de acoso cibernético de acuerdo con el libro “El ciberacoso: El tiranizar en la era digital” de Robin M. Kowalski, se dan en la mensajería instantánea, correo electrónico, mensajes de texto a través de teléfonos celulares, redes sociales, chats, blogs y juegos por internet. Kowalski identifica al menos 8 tipos de acoso cibernético:
- Insultos electrónicos, ofensas que algún o alguna usuaria hace a otra u otro.
2.-Hostigamiento, implica el envío de mensajes ofensivos de forma reiterada a una persona determinada, ya sea por medio del correo electrónico, chats, mensajes de texto, etc.
3.-Denigración, se refiere a la difusión de información despectiva o falsa de alguna persona, como es el caso de la publicación de fotografías alteradas.
4.-Suplantación, implica que el o la acosador se haga pasar por la víctima, ya sea utilizando la contraseña de acceso de sus cuentas online para enviar mensajes agresivos u ofensivos o terceras personas como si hubieran sido enviados por la propia víctima.
5.-Sonsacamiento, radica en revelar información privada de la víctima que en un principio fue enviada por la víctima de forma privada o sonsacada para después difundirla a otras personas sin permiso de la víctima.
6.-Exclusión, se realiza con la finalidad de excluirla o no dejarla participar.
7.-Ciberpersecución, consiste en el envío de comunicaciones electrónicas reiteradas hostigadoras y amenazantes.
8.-Happy slapping, en la cual se realiza una agresión física que se graba por algún medio digital para ser publicado en la red y sea público.
El Estado de Quintana Roo incluso supera la media nacional del 24.5 % en casos de ciberacoso y grooming, donde los lideres de la estadística negativa son el Estado de México con 30.7% y Aguascalientes con 32%.
Por eso es importante que los padres estén al pendiente de los hijos y contabilizarlos de los riesgos que pueden encontrar en el mundo del “ciberespacio”.
Es importante reflexionar que el acoso cibernético también es violencia, toda vez que a las víctimas les afecta gravemente en el desarrollo de su personalidad, y a las personas que acosan, les hace creer que gozan de impunidad ante estos actos.
Por ello, es importante que quienes han sido víctimas de acoso cibernético, tanto hombres como mujeres, hablen y denuncien esta situación y pierdan el miedo al empleo de las nuevas tecnologías de la comunicación y la información.
